Se extraña a Nicolás Casullo fundando Carta Abierta; se extraña a Horacio Gonzalez dirigiendo la biblioteca nacional; se extraña a María Seoane dirigiendo Radio Nacional; se extraña 678; se extraña a Martín Sabatella impulsando la ley de medios.
Basta de buenos modales; basta de pedir disculpas; basta de aceptar a los operadores de cuarta como guardianes de la moral.
Vale la pena presidir el estado para no usarlo?
La pandemia nos empobreció pero sobretodo nos quitó la calle.
Vivimos en estado de retroceso. Vox reinvindicó a Hernán Cortes. La derecha vernácula esgrime orgullosa su negacionismo.
Padre, deje usted de llorar que nos han declarado la guera
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